domingo, 13 de marzo de 2011

Ojo Crítico

COLUMNISTA

RODOLFO CERDAS POLITÓLOGO 08:13 A.M. 12/03/2011
Costa Rica si no quiere tener una pantomima de democracia, tiene que parar en seco a algunos grupos que quieren adueñarse totalmente de las estructuras de poder del Estado. Lo que ocurre hoy es más grave que usar el poder en beneficio propio; por ejemplo, llamando por teléfono a la abogada del Estado, para asegurarse de que un recurso de casación será presentado (al margen de lo que en él se alegue, porque su contenido políticamente es irrelevante). O llamar nada menos que al ministro de Seguridad Pública, como si fuera chiquillo de mandados, para hacer averiguaciones contrarias a su cargo, aunque se irrespetara al Poder Judicial y la separación de poderes. Esto revela el “do ut des” –te doy para que me des– entre políticos y ciertos funcionarios, que asocia nombramientos con favores posteriores.
En política esto es normal. Son redes de poder, que se crean gracias a la impotencia, la incapacidad o la complicidad calculada de los opositores. Se pretende burlar controles e investigaciones peligrosas o incómodas. En nuestro caso, es además la culminación del tinglado que necesitaba la “democracia en dictadura”: diputados “yes man”, justicia neutralizada, controles mediatizados, e instituciones y entes estatales al servicio de líderes políticos y de los grupos sectoriales que representan. Pero eso sí, con elecciones cuatrianuales.
Hoy, la situación ha ido más allá. Dos áreas que –aunque estaban interconectadas entre sí y hasta se contrapesaban, se mantenían separadas–, hoy se han ido fundiendo en un solo grupo de poder político, social y plutocrático. En otras palabras, se está dando una fusión –que considero muy peligrosa– entre el poder político y ciertos grupos de poder fáctico, que hasta podrían incluir a la Iglesia Católica, dados sus conocidos intereses financieros.
No extraña, entonces, que las concesiones –carreteras, puentes, aeropuerto–, los contratos millonarios del Estado y la impunidad con que se han derrochados miles de millones de dólares del erario público, nos mantengan perplejos. En casi todos los casos se han visto involucrados los más altos funcionarios, que sin decoro alguno aceptaron y firmaron los contratos y concesiones que acabaron en el más vergonzoso fracaso. Es allí, justamente, donde opera la red de poder, asegurando la impunidad y que nadie responda por nada. Pero claro: ¿dónde estaban los engominados altos encargados, cuando se acordó y firmó el calculado desatino? Tal vez inaugurando alguna de estas obras “nuevas”.
Esos millones perdidos, que algunos disfrutan tranquilos, son buena parte de los huecos presupuestarios. Pero gracias a ese nuevo poder concentrado, en vez de pagarlos quienes debieran, se pretende que los pague el pueblo con más impuestos. Como dijo Aquileo: ¡mirala!
Fuente: nacion.com.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Los Arias

Miércoles, 09 de Marzo de 2011 05:30
Escrito por Helio Gallardo (Profesor)

Su texto, dirigido por Sánchez a sus ‘tíos’, puede leerse como una conjura para manipular el sufragio que decidiría la disputa. Es seguro que la Dirección Nacional de Inteligencia (?) tiene una carpeta con su esfuerzo sedicioso. Si no la tiene, puede pedirla al Tribunal Supremo de Elecciones. Él vela por la rectitud de los procesos electorales.

El aporte del ‘tercer Arias’ es decisivo para asumir que a “los Arias” les vale poco la institucionalidad del país si ella limita o frustra sus deseos. La institucionalidad sirve. Pero si no es posible usarla, se la tuerce, ignora o abandona. Es la mofa de la “dictadura en democracia” de Óscar y la gula por una Constituyente, de Rodrigo. Pero Sánchez Campos hizo mucho más que este aporte básico para encuadrar a los Arias. Autor confeso de la marranada conspirativa su situación jurídica (un diputado cazado trampeando la voluntad ciudadana) se paseó muy/mucho lentamente por la Asamblea Legislativa, el Tribunal Supremo de Elecciones y la Sala IV, para retornar a la Asamblea y ¡ser archivada y en la práctica y anulada! por los diputados del PLUSC, dos libertarios, la señora Arguedas y el señor Echandi.

El clan celebró la impunidad de Sánchez. El primo/sobrino había demostrado que sus tíos sí pueden articular (nada de ingobernabilidad aquí) Poder Electoral, Poder Judicial y Asamblea Legislativa si de salvar se trata no la cara sino el pellejo. El Arias impune fue nombrado a la corta Embajador en el Vaticano por la administración actual. El premio quizás se deba a la ‘admiración y aprecio’ que la presidenta Chinchilla siente por Óscar (LN: 27/02/11), a una temprana sordera que le impide escuchar a los ciudadanos indignados o al hecho de que Sánchez Campos es católico rabioso y por ello su tufillo no despertaría inquietud entre tantos ángeles. O tal vez Laura no desea molestar a su correligionario Rodrigo. ¡Se ven tan amigos!

De los Arias restantes, Óscar es el desangelado. No despierta simpatías, excepto cuando habla de él mismo y él lo sabe. Por eso Óscar habla tanto de Óscar. Un individuo tímido buscando simpatía. Muchos no lo entienden y lo consideran engreído y vano. No, es cortedad. La misma que lo lleva a confiar ciegamente en sus funcionarios. Por eso nunca interrogó sobre Crucitas a Dobles, ni a Zumbado por el uso de 1.5 millones de dólares taiwaneses, ni a Ortuño acerca de si el dinero del BCIE podría ser sospechado como público, ni a Karlita por los detalles de la alegre concesión regalada a Autopistas del Sol. Óscar es un tímido que se sonroja y mueve una mano como queriendo ahuyentar visiones si un diputado asegura que los costarricenses lo elegirán el hombre del siglo XXI y que entonces su estatua adornará Su Plaza en el mismo lugar donde se alzó la del desconocido Figueres Ferrer. El expresidente mueve su mano y susurra: “‘Muy largo me lo fiáis’, como ha escrito Mercedes Sosa”. Es que este hombre tímido es leído. Un intelectual.

Rodrigo es otra cosa. A él la familia le dio la responsabilidad de ver cómo la legislación faculta para emprender cosas buenas. Sin trampas, eso sí. Por celular incluso pero sin trampas. Algún observador estima que Costa Rica siguió el camino más largo para llegar a ser como resto de Centroamérica: invirtió en capital humano. Puede ser. Rodrigo, el man de hoy, se parece físicamente más a los Somoza que a un dirigente tico. Se presenta siempre como recién salido del spa y sus masajes, lustrado como si quisiera ocultar algún pringue, excedido de peso, jovial, palmeando espaldas y dando abrazos, festejando cumpleañeros y controlando quien no llega y quien no obedece. Un buen tipo, diría J. Gandolfini. Tanto, que, sin ser presidente aún, ya tiene un clon: igual de pulido aunque una pizca menos exquisito y algo más calvo: Víctor Hugo Víquez. Quien sabe. A lo mejor los tres Arias, como los mosqueteros, resultan siendo cuatro.




jueves, 3 de marzo de 2011

Gobierno de Arias evaluó ligar $1 millón decomisado al movimiento "No"

Vea toda la información de wikileaks aquí

 Esteban Oviedo eoviedo@nacion.com 05:06 p.m. 03/03/2011

San José (Redacción). Fernando Berrocal, exministro de Seguridad, reconoció esta mañana que el Gobierno anterior evaluó la posibilidad de achacar al movimiento del “No al TLC” la aparición de $1 millón que fue decomisado en la frontera con Nicaragua, en el año 2007.

Pablo Aguilar/ ADN Radio

Berrocal lo admitió en una entrevista concedida a radio ADN (90.7 FM) para conversar sobre los cables diplomáticos de Estados Unidos obtenidos por WikiLeaks y divulgados por La Nación.

El exministro aceptó el hecho luego de que el líder sindical, Albino Vargas, lo mencionara en plena entrevista que fue transmitida en vivo después de las 8 a. m.

El sindicalista dijo: "Supimos de maniobras sucias, por decirlo así. Y aquí lo podemos decir, yo sé que don Fernando no lo hizo. En una ocasión que agarraron un cargamento de cocaína en la frontera con Nicaragua, $1 millón, Rodrigo Arias (entonces ministro de la Presidencia) dio la instrucción de que dijeran que esa cocaína y esos dólares eran para el movimiento del 'No'. Don Fernando, hay que reconocérselo, no aceptó la orden de Rodrigo Arias Sánchez de que él tenía que salir a decir que esa coca y esos dólares eran para el movimiento".

De seguido, el exministro de Seguridad dijo: "Efevtivamente en la frontera norte se incautó $1 millón y un poquito más y digamos que hubo un poquito la tendencia a que eso se dijera que era plata que venía para el 'No' y yo me opuse violentamente a que trascendiera y eso se descartó totalmente".

Berrocal detalló que el tema fue tratado en una reunión sostenida en Casa Presidencial con "gente que estaba manejando cuestiones de imagen", en la que participaron al menos él, Rodrigo Arias y Mimí Prado, entonces asesora en el campo de la comunicación y actual embajadora en El Salvador.

La embajadora dijo hoy, desde San Salvador, que la hipótesis sí se mencionó pero en términos de investigación, nunca con la intención de lanzarla a la opinión pública sin haberla verificado.
Siempre dentro de la conversación en ADN, luego el exjerarca de Seguridad dijo que fue una "inquiteud", pero él investigó la hipótesis y la descartó, por lo que nunca mencionó la posibilidad ante la opinión pública.

"También, había una hipótesis de que ese dinero venía de Venezuela, no fue comprobada. Se sospechó muchísimo de que ese dinero venía de Venezuela. Todo se descartó y simplemente se trató de un caso más de narcotráfico", dijo Berrocal, al tiempo que Albino Vargas insistía en que el gobierno de Arias trataba de desprestigiar al movimiento de oposición.

El incautamiento citado ocurrió el 4 de julio en Los Chiles, Alajuela, en la frontera con Nicaragua, tres meses antes del referendo celebrado en el país para que el electorado decidiera si aprobaba el rechazaba el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, el cual fue avalado en una cerrada votación.

Ese 4 de julio, la policía encontró $1 millón en cuatro salveques que un grupo de presuntos narcos dejó abandonados tras enfrentarse a balazos con las autoridades en la comunidad de Cuatro Esquinas.
Incluso, uno de los sospechosos, de origen nicaragüense, murió en el acto. La policía detalló que el dinero venía en fajos de billetes de $20, $50 y $100.

Para Fernando Berrocal, el hecho de no haber salido a la luz pública con la hipótesis de que el dinero tenía que ver con la oposición al TLC juega a favor de la ética del gobierno anterior.
El exministro también cuestionó a Albino Vargas al decir que este viajó a Washington financiado por una organización sindical estadounidense. Vargas le respondió que no es lo mismo el apoyo entre gremios que la entrega de un gobierno a otro, lo que fue rechazado por Berrocal.

Fuente: nacion.com.